Probamos exhaustivamente la nueva cinta de manillar de la firma española, realizada en RPC para lograr el máximo agarre, comodidad y durabilidad.
Si decimos Rifyl enseguida nos viene a la mente
calcetines molones y puños para MTB, pero a partir de hoy también cinta de manillar de carretera, ya que hace poco más de un mes
nos enterábamos del lanzamiento de su nueva cinta de manillar, que como no, seguía los pasos de los puños de la joven marca albaceteña y venía fabricada en RPC, un material exclusivo de Rifyl con el que se consigue un agarre, comodidad y durabilidad muy elevado gracias a su construcción a través de un especial polímero sintético. Gracias a Rifyl hemos tenido la oportunidad de probar exhaustivamente y en todo tipo de condiciones esta cinta y os lo contamos al detalle.
Como poco es curioso ver cintas de manillar que estén elaboradas en otro material diferente al corcho, el poliuretano o la microfibra, pero con el paso del tiempo otras marcas se están atreviendo con otros materiales, como la silicona o como en el caso de Rifyl, el mencionado RPC, un material que desde su instalación en nuestra bicicleta de pruebas ya mostró su buen hacer, logrando una instalación sumamente fácil, consiguiendo un excelente agarre al manillar sin tener ningún tipo de ayuda extra, tales como adhesivos en su parte interior, característica que una vez gastada nos facilitará su desinstalación, ya que no nos dejará ningún tipo de suciedad ni residuo pegado en el manillar, cosa que es de agradecer. El material es muy elástico, por lo que es posible dejar un mayor grosor, lo que aumenta su comodidad final, o estirarla más y tener un mayor tacto de manillar, nosotros nos decantamos por algo intermedio, queriendo conseguir una mezcla de ambas sensaciones. La cinta se fija al centro del manillar gracias a una cinta autoadhesiva, presente en el pack, que se adhiere muy, muy bien y logra que no se mueva nunca más, y se remata gracias a los tapones que también incluye, los mismos que vienen en los puños de MTB, un detalle que no nos acabó de gustar, ya que no acabamos de conseguir que se quedarán quietos, ni que se fijarán tan bien como unos tapones estándar de carretera. Aún así, su instalación es de lo más fácil que hemos probado.
Como ya hemos comentado, el RPC está ideado para conseguir el máximo agarre, comodidad y durabilidad, y al igual que los puños (
que tuvimos la oportunidad de hacer una comparativa), la cinta de manillar presenta un
grip excelente incluso en días donde la lluvia e incluso tormentas, hicieron acto de presencia, consiguiendo una excelente seguridad, ya que las manos no tendieron a resbalar, sino más bien lo contrario, manteniéndose en todo momento en su posición.
La cinta se probó varios días a la semana, durante sesiones de hasta 6 horas, y sencillamente brilló por su elevada comodidad, logrando que las manos no llegaran fatigadas al final de la salida, lo que se tradujo en un mayor rendimiento físico. Esta comodidad lleva la versatilidad escrita a su alrededor, ya que la cinta es perfecta tanto para bicicletas de carretera, y más si entrenas por zonas donde el asfalto está en mal estado, como para bicicletas de Ciclocross y sobretodo para Gravel Bikes, donde hay una gran diversidad de terreno. Y todo se debe a la gran absorción del RPC sobre las irregularidades del terreno, convirtiéndola, sin lugar a dudas, en una de las cintas más cómodas del mercado.
A pesar de los cambios de tiempo que hemos sufrido este verano en España, y de pasar al sol muchas horas, la cinta acabó intacta de aspecto, sin ninguna pérdida de color, gracias a su protección UV-400, y sin ninguna rotura, y eso que pasó por una aparatosa caída. Aún así estaba perfecta, como nueva, presentando un gran aspecto al final de nuestra prueba.
El peso que nos dio en nuestra báscula fue de exactamente 282 gramos sin cortar, una cifra algo elevada, y quizás podría no acabar de convencer a los más sibaritas del peso, aún así no es un dato que tire la labor de la marca por los suelos, ya que no es algo que Rifyl haga hincapié, y que sinceramente pasa desapercibido al ver su rendimiento una vez montada.
VEREDICTO
Nuestras sensaciones con la cinta de manillar Rifyl fueran buenas de buen principio, desde su facilísimo montaje -a pesar de los tapones- hasta las largas jornadas ciclistas, que se hicieron mucho más venideras gracias a su excelente rendimiento, destacando todo lo prometido por la marca: durabilidad, agarre y comodidad, mucha comodidad, lo que le convierte en una cinta idónea para carretera, Ciclocross o Gravel. Si eres de los que el peso les importa un bledo y quiere ante todo un excelente rendimiento, esta es tu cinta. Ni lo dudes.
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Nota: 4,5 de 5 |
PROS
- Durabilidad
- Gran Grip
- Excelente comodidad
- Facilidad de montaje
- Disponible en 7 colores
CONTRAS
- Tapones de MTB
- Peso algo elevado
Características:
- Cinta de manillar Rifyl Linger fabricada en RPC
- Disponible en siete colores (verde, rojo, negro, naranja , blanco, amarillo y azul)
- Precio recomendado: 39,95€
- Fabricante: Rifyl