Scott ha presentado la Addict CX, la bicicleta de ciclocross con frenos de disco más ligera del mercado.
La firma acaba de anunciar el lanzamiento de la nueva Addict CX, que se ve actualizada para dar cabida a los nuevos sistemas de freno de disco y proporcionar un mayor rendimiento, siendo más ligera, rígida y cómoda que el pasado modelo. Para conseguir dicho objetivo en Scott han creado un cuadro realmente ligero, utilizando el método IMP, visto en la Addict de carretera, e incorporando punteras traseras huecas, con lo que se consigue un peso declarado de 890 gramos para el cuadro (talla 54) y 360 gramos para la horquilla. Lo que convierte al nuevo cuadro 60 gramos más ligero que la anterior versión, que recordemos, tenía frenos convencionales.
Si en la ligereza han cogido la tecnología IMP de la Addict, para ofrecer una mayor comodidad, el reconocido fabricante ha utilizado el moldeado de la tubería progresivo de la Solace, con una forma de circular a ovalado, desde la pipa de dirección hasta el tubo vertical donde deriva en los tirantes, los cuales comienzan 30mm antes del tubo vertical, lo que le confiere un 45% más de comodidad en marcha, un dato realmente impresionante.
La Addict CX incluye tecnologías para elevar la rigidez, como la dirección cónica integrada de 1 1/8" a 1 1/2" o el eje de pedalier PF86, y otras específicas para dar un gran rendimiento en ciclocross, como un mayor paso de rueda en horquilla y cuadro, o unas vainas con una forma específicamente diseñada para impedir que el barro se acumule en esa zona.
La Scott Addict CX estará disponible en dos versiones, la tope de gama Addict CX10, con transmisión SRAM Force CX, frenos SRAM Force y ruedas Syncros RP1.0 Carbon Disc, y la Addict CX 20, con transmisión Shimano 105 con mandos y frenos Shimano ST-RS505, y ruedas Syncros RP2.0 Disc.
Más información: www.scott-sports.com
La firma acaba de anunciar el lanzamiento de la nueva Addict CX, que se ve actualizada para dar cabida a los nuevos sistemas de freno de disco y proporcionar un mayor rendimiento, siendo más ligera, rígida y cómoda que el pasado modelo. Para conseguir dicho objetivo en Scott han creado un cuadro realmente ligero, utilizando el método IMP, visto en la Addict de carretera, e incorporando punteras traseras huecas, con lo que se consigue un peso declarado de 890 gramos para el cuadro (talla 54) y 360 gramos para la horquilla. Lo que convierte al nuevo cuadro 60 gramos más ligero que la anterior versión, que recordemos, tenía frenos convencionales.
Si en la ligereza han cogido la tecnología IMP de la Addict, para ofrecer una mayor comodidad, el reconocido fabricante ha utilizado el moldeado de la tubería progresivo de la Solace, con una forma de circular a ovalado, desde la pipa de dirección hasta el tubo vertical donde deriva en los tirantes, los cuales comienzan 30mm antes del tubo vertical, lo que le confiere un 45% más de comodidad en marcha, un dato realmente impresionante.
La Addict CX incluye tecnologías para elevar la rigidez, como la dirección cónica integrada de 1 1/8" a 1 1/2" o el eje de pedalier PF86, y otras específicas para dar un gran rendimiento en ciclocross, como un mayor paso de rueda en horquilla y cuadro, o unas vainas con una forma específicamente diseñada para impedir que el barro se acumule en esa zona.
La Scott Addict CX estará disponible en dos versiones, la tope de gama Addict CX10, con transmisión SRAM Force CX, frenos SRAM Force y ruedas Syncros RP1.0 Carbon Disc, y la Addict CX 20, con transmisión Shimano 105 con mandos y frenos Shimano ST-RS505, y ruedas Syncros RP2.0 Disc.
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